Acabo de solicitar el mismo crédito en cascada a las
principales entidades financieras. No quisiera sumar a mi reconocida
insolvencia otro motivo para las denegaciones.
De forma que evitaré provocar reacciones furibundas
desde el progresismo y el conservadurismo, dotando de ánimo positivo a mis
argumentos. Vamos allá.
¿Por qué a nadie se le ha ocurrido que la mejor
manera de combatir la violencia de género, también denominada maltrato
machista, consistiría en apoyar dos actitudes contrarias: la ternura de género
y el mimo machista? No es tan difícil si
hay voluntad.
Confieso que tengo mis limitaciones. Como no
conseguía dar contenido al enunciado de ambos conceptos, he acudido una vez más
a ese pozo de sabiduría varsoviana llamado Metodio Jodorowsky. He pillado al
profesor en el momento mas adecuado, eufórico como pocas veces.
Está a punto de publicar en Amazon su ensayo Nepotyzm para (Nepotismo de pareja),
justo el tema que deseaba consultarle. No he querido enfriar su entusiasmo,
diciéndole que Amazon no tiene página en Polonia. Ya se dará cuenta a su debido
cobro de royalties.
Tras enviarle un wasap, me ha devuelto un mensaje por correo electrónico donde
demuestra su vasta cultura, que se torna en basta cuando se pasa de vodka. Lo
reproduzco:
«Amigo
Julius, el nepotismo positivo entre hombre y mujer es una invención propia de
las clases altas en las sociedades contemporáneas. Prácticamente hasta el siglo
XX no se detectan casos, pues la hembra
quedaba reducida a las tareas del hogar y al cuidado de los hijos, salvo casos
de adulterio consentido por el cabeza de familia. Te daré algunas pistas. El
presidente argentino Perón es quizás el gran paradigma, promoviendo a sus
esposas Evita y María Estela. Le siguen otros dignatarios con notable éxito. Como
tengo artritis reumatoide en los dedos,
dejo de teclear. Entra en Google y busca
ejemplos en este país tuyo que me ha acogido».
Le agradezco de inmediato su ayuda desinteresada y me
pongo a navegar por Internet. Enseguida me saltan a la vista cuatro casos significativos
sobre ternura de género:
· -Una alcaldesa
por accidente, amante del café con leche en una plaza mayor.
· -Marido y hermano
con apellidos de tenista, copando altos cargos económicos (no en el sentido de
mal pagados) y beneficiando con chollo a la consorte y cuñada.
· -En sentido
opuesto (mimo hembrista) otra alcaldesa que coloca a su cónyuge en una gran ciudad
del noreste español. Español de momento.
· -La novia de un
líder renovador que pasa con él las 24 horas del día, de casa al Congreso y
vuelta, con puestos relevantes ambos.
Dignos representantes del mimo
machista al que tiende la casta dirigente.
En el plano institucional, debe
aplaudirse que Congreso y Senado hayan sido pioneros en aplicarse la
conciliación familiar, tan reivindicada inútilmente por millones de ciudadanos
sin cargo. Por algo se empieza.
Al avanzar la hora de cierre
en los plenos, parlamentarias y parlamentarios llegan a casa con tiempo para disfrutar
con plenitud las delicias hogareñas. En cuanto a las solteras y solteros
bicamerales, pueden quedar para tomar unas copas e ir a bailar. El roce lleva al cariño. Mejorará la
convivencia entre partidos, superando la barrera ideológica que supone ser del
Madrid o del Barça.